AIRES PRIMIGENIOS
Mi nariz postrada en el firmamento respira el aire lleno de colores. Respira mi nariz en los albores de mi persona, de mi advenimiento, lo hace en la tierra que me dio sustento, de la que nacen todos mis dolores, tierra santa para los soñadores donde escuchar la música del viento. Los colores del aire de la infancia son la alegría que hay en el corazón. La vida puede estar marchita y lacia y el alma más oscura que el carbón; pero cuando respiro esa fragancia siento que hay esperanza, ¡oh respiración! OJLC Original de Óscar Julián López Carpio Escrito y firmado por Óscar Julián López Carpio © Reservados todos los derechos